Comparte en tus redes:

SANTA CRUZ – 10-09-21

Por Edgar Ramos Andrade (*) chaco.amazonia@gmail.com 
+591-75801838
Santa Cruz de la Sierra, Bolivia. 10 septiembre 2021.-

TESTIGOS SOLIDARIOS Y FECHAS

1. En septiembre recordamos  –no debemos olvidar–  50 años de desaparición de la periodista cruceña Leslie Magdalena Andreuzzi Vaca Díez, cuya huella y memoria algunos agentes, militares y gobiernos quieren borrar. Con testimonios y el Informe Comisión Verdad Bolivia, intentemos precisar esta vergüenza internacional. Tras la masacre del 19 de agosto 1971 en la Universidad Gabriel René Moreno, Federación de Fabriles de calle Junín y Templo La Merced, Leslie fue llevada a la 8va División de Ejército, luego a El Pari, la DOP, a La Paz y Viacha donde fue fusilada.

2. A fines de agosto 1971, la abogada LEDY CATOIRA (69 años) detenida y torturada en la 8va División, habló con DELIA BARBA, enfermera del Cuerpo Médico de esa unidad militar y supo del suplicio y condiciones infrahumanas de la periodista. “Me quedó en la memoria ese nombre: Leslie Andreuzzi Vaca Díez, al retornar del exilio, indagué y hable con su hija”, señala Catoira. Otros testigos fueron: Roger Emilio Tuero Velásquez, Luis Mazzone, y Dardo Suárez Justiniano.

3. En agosto 1971, Nerhedine Renjjiffe (NURI NASSIF, 75 años, ex dirigente fabril y caminero) era Director Departamental del Trabajo (gobierno de Juan José Torres). A horas 10:00 am del día 19 la periodista Leslie entrevistó a Nuri y a mediodía, ante un tumulto en la Plaza 24 tuvo que refugiarse en el edificio de la Universidad. “Luego de ello, Leslie fue detenida y llevada a la 8va División donde fue violada por 100 soldados. Tenemos testimonios de personas arrepentidas”, indica Nuri.

TESTIGOS CRUELES Y LIBERTINOS

4. Tras haber sido torturada y vejada en la 8va División de la calle Charcas, Leslie fue llevada a la Dirección de Orden Político DOP en la Manzana Uno (actual Brigada Parlamentaria Cruceña). Allí, Roger Tuero conversó con Leslie y se enteró cómo la maltrataron soldados, oficiales y paramilitares. El director de la DOP era Pedro Percy “Paye” Gonzales Monasterio, quien está libre y vive en Santa Cruz, cerca de la CIBOD y tiene información de adónde fueron llevados los restos de Andreuzzi. Antes de ser asesinada y desaparecida, Leslie estuvo: una semana en Santa Cruz (19 al 26 agosto 1971; y 17 días en La Paz (26 agosto al 13 septiembre 1971).

5. Andreuzzi también fue trasladada a la carceleta El Pari, en Av Grigotá de La Ramada, entre calles La Guardia y Sutos (actual Unidad Táctica de Operaciones Policiales UTOP) que en 1971 era Campo de Concentración donde muchos presos políticos entraban vivos y salían cadáver, como los hermanos Félix y Alcides Sandóval Morón, y no valía el reclamo de familias como la señora Pura Arrien de Sandóval. El director de El Pari era Ernesto Morant Lijerón, quien fue procesado por: Privación de libertad, vejaciones y torturas, asociación delictuosa, organización criminal asesinato y encubrimiento. Falleció en pleno juicio.

6. El Pari y DOP eran Campos de Concentración y “depósito transitorio” de presos políticos que luego eran asesinados por la “Ley de fuga en guerra”, rematados previo cavado de tumba propia por ejemplo a orillas del río Piraí, o llevados a La Paz. Los disparos, gritos y lamentos eran frecuentes en El Pari (VER El Deber 26 abril 2020). De esto conocen, entre otros: Justo Sarmiento Alanes (ayudante de “Paye”), Oscar Menacho Vaca, Elías Moreno Caballero, Widen Razuk Abrene, Hernán “Negro” Cronembold Parada, N Leigue Gutiérrez, Hugo y Guillermo Menacho Carrillo, Oscar Román Vaca, Freddy Terrazas (que fusilaba pacientes).

AUTORIDADES MILITARES Y CIVILES

7. En 1971, el Cnel Andrés Selich Shopp formado en la Escuela de las Américas, era Comandante del Regimiento Manchego-“Rangers” (unidad antisubversiva) y era temido (casi psicópata). Tuvo 4 acciones destacadas: Llegó a la plaza 24 con tanquetas, ordenó fusilar a los detenidos en la Universidad, encabezó el desfile golpista de saludos hitlerianos, y formó un efímero triunvirato con Hugo Banzer y Florentino Mendieta. Fue su orden: “¡Ni un perro rojo vivo…!”, eso inspiró a militares y paramilitares. Fue ministro del Interior y visitó los regimientos que eran campos de concentración, y buscó apoyo para sustituir a Bánzer pero fue “pillado” y, luego, torturado por orden de Bánzer hasta morir en la casa de Alfredo “Cubo” Arce, el 17 de mayo de 1973.

8. El Cnel Carlos Alcoreza fue ministro de Economía con René Barrientos. En 1971 era Comandante del Regimiento Bolívar 2 de Artillería Viacha, ese campo de concentración de 700 detenidos políticos, varios de ellos fusilados, como Leslie Andreuzzi. El oficial militar Reque Terán fue quien esperó a Leslie en el Aeropuerto El Alto y la separó del grupo de detenidos políticos llevados desde Santa Cruz; la llevó al DOP La Paz y luego al Regimiento Bolívar donde Leslie fue fusilada el 13 septiembre 1971 a horas 4:00 am. Sus restos están desaparecidos.

9. El cruceño Juan Antonio Elío Rivero era Subsecretario del Ministerio del Interior en cuyos sótanos los detenidos políticos eran torturados hasta hacer desaparecer sus restos. En Santa Cruz, Elío tenía su propia “oficina privada de torturas”, ubicada en la Av Radial Beni y 1er anillo, cerca del actual Palacio de Justicia. Ese predio ahora es de la empresa BOA.

CONCLUSIONES

a) En el caso de la periodista Andreuzzi, los soldados clase 1971 comenzaron a hablar. Los dirigentes sindicales de esa época tienen datos iniciales. ¿Quiénes eran autoridades institucionales militares en 1971?: Selich (“Rangers”), Alcoreza (“Bolívar”) y se sabrá en breve quien fue Comandante de la 8va División, su alto mando y suboficiales, los que ordenaron vejar a Leslie.

b) Nada de lo descrito aquí fue investigado judicialmente. La Fiscalía General no se pronuncia sobre el Informe de la Comisión Verdad Bolivia; su silencio es aterrador. El Tribunal Supremo de Justicia no crea los “Juzgados para delitos de lesa humanidad” dispuestos por sentencias de la Corte IDH. El gobierno no indemnizó y se burla de las víctimas que exigen justicia a la intemperie en la carpa El Prado.

c) El Órgano Electoral tiene deuda aparte. Como órgano base de la democracia no inició el proceso de reconocimiento a las víctimas de las dictaduras por su aporte a la democracia. El Parlamento olvidó fiscalizar este embrollo y la Defensoría del Pueblo… ni hablar. O sea, los cuatro  órganos del Estado boliviano ni entienden qué es “Plan Cóndor” figen todo y mantienen una “Mentira organizada” que nos cantaba Benjo Cruz (Benjamín Inda Cordeiro, otro desaparecido) y persisten en la “Protección colusiva” a matones, militares y paramilitares.

d) Hay algunos avances, desde fuera de Bolivia: La CIDH (Washington) y la Corte Interamericana de Justicia (San José de Costa Rica) atiende cinco casos contra el país y sus órganos de conducción por el caso de las dictaduras: José Carlos Trujillo Oroza, Renato Ticona Estrada, Víctimas múltiples (caso CIDH 13122), entre otros. Ante la cruel mezquindad de nuestras autoridades, legislativas, gubernamentales, judiciales y electorales, habrá que persistir en procesos internacionales.

e) Aquí escribimos con fundamento y fuente. Todo criterio es rescatable si es respetuoso.

(*) Edgar Ramos Andrade. Comunicador, Investigador y Activista Social, devenido en historiador por necesidad nacional. Es autor de “Ninguneados y despreciados de Bolivia” (calendario de pared, cartilla, y libro en edición final) entre otros; 
chaco.amazonia@gmail.com  +591-75801838.

Loading

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *