SUCRE-CHUQUISACA-18-07-21
Experiencia y concentración fue la carta de presentación del vigente campeón de la División Profesional, Always Ready que se dio el gusto de ganar de visitante a Independiente Petrolero por 2-1 en el estadio Patria, de Sucre ante una buena cantidad de público. El partido correspondió a la novena fecha del torneo Único.
Fue una tarde-noche con fricciones en el campo de juego que obligó al árbitro Carlos Arteaga (Santa Cruz) a tomar medidas drásticas, además se perdió tiempo ante las reacciones descalificadas de algunos jugadores, no menos cierto es que los dos equipos se quedaron sin sus técnicos ya que tanto Juan Marcelo Robledo y Omar Asad fueron expulsados (del local y visitante de manera respectiva), a ellos se sumó Samuel Galindo de la visita.
La primera etapa del cotejo fue para el equipo local que se colocó en ventaja en el minuto 10 con un gol de Martín Prost, quien estaba atento para recibir el pase de Gustavo Cristaldo tras un desborde desde el carril derecho, el arquero Pedro Galindo nada puede hacer para despejar el balón, era el 1 a 0 que no desaprovecha el autor del tanto.
A los 33 minutos el partido fue detenido debido a un choque entre jugadores y cuerpo técnico, los futbolistas de ambos equipos se van con todo, al árbitro se le escapaba de las manos el control del juego, después las aguas se calman y el encuentro continúo, con la ventaja de un gol a favor de los locales que fueron bajando las cargas.
En el descanso, los jugadores de Always Ready ingresan al campo de juego con la finalidad de remontar el marcador, es a los 68 minutos cuando el jugador Nelson Cabrera se encarga de igualar el marcador tras un pase de Samuel Galindo como con la mano, la pelota ingresa al arco por el ángulo izquierdo que sorprende a los defensores locales.
Jair Catuy, de Always Ready convierte el segundo tanto a los 85 minutos en una jugada rápida que dejó en mala posición al arquero del local, era el 1-2 que no esperaban los locales y que al final sería el resultado definitivo, pues el dueño de casa no tuvo más argumentos como para igualar el marcador, el tiempo también les jugó una mala pasada.
El marcador no fue del agrado de los hinchas del dueño de casa, pues esperaban una victoria en su campo de juego, pero sus argumentos futbolísticos no fueron suficientes y se quedaron con las manos vacías y la rabia contenida, porque no esperaban una derrota en su casa.
APG/VL jb
FOTO/STR/APG
